La exposición al sol en cualquier estación puede causar estragos en la piel si no se toman las precauciones adecuadas.
Tanto si vas a cenar al aire libre como a nadar, a sudar en un paseo en bicicleta o simplemente a pasar unos momentos tomando el sol, es importante que te asegures de que cuidas tu cuerpo para poder disfrutar de esos rayos durante toda la temporada.
Mantente hidratado
Como aspecto importante de la salud general, mantenerse hidratado también ayuda a mantener el contenido de agua de la piel. Asegúrate de beber mucha agua a lo largo del día, sobre todo cuando suban las temperaturas y pases más tiempo al aire libre. Otra forma deliciosa de evitar la deshidratación -que, en casos leves, provoca una pérdida de energía- es comer frutas y verduras con un alto contenido en agua. Un ejemplo es la sandía, que contiene un 92% de agua y puede ayudar a reponer líquidos.
Priorice la protección de la piel
Tanto si va a estar al sol unos minutos como unas horas, es primordial proteger la piel aplicando un protector solar. En los días en los que el índice UV sea de 3 o superior, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan aplicar un protector solar de amplio espectro SPF 15 o superior. Otra opción es llevar ropa ligera y holgada que cubra la mayor parte posible de la piel sin dejar de estar cómodo con el calor.
Refréscate la cara
Al ser una de las partes del cuerpo más expuestas al sol, el rostro es quizás la zona más importante que hay que cuidar durante los meses más soleados. Un tratamiento facial casero, totalmente natural y hecho por ti mismo, es una forma de darte un capricho hidratante y luminoso.
Para conseguir un verdadero resplandor desde la comodidad de tu propia casa, prueba esta solución rápida y fácil: Mezcla 2 cucharadas de yogur griego (para exfoliar y purificar) con 1 cucharada de zumo de sandía (para hidratar). Aplícate la mascarilla en la cara y el cuello durante 10 minutos y, a continuación, aclárala y sécate la piel a golpecitos.
Piensa en todo tu cuerpo
Aunque es probable que tu cara reciba mucho sol, eso no debería significar descuidar el resto de tu cuerpo. Este suave exfoliante corporal puede darte ese brillo que buscas con un aroma dulce y afrutado.
A continuación te explicamos cómo exfoliar y abrillantar tu piel: Combina 1 taza y media de azúcar blanco, 1 cucharadita de zumo de limón y 1/4 de taza de zumo de sandía. Si quieres, añade 1 cucharadita de ralladura de corteza de sandía microplanificada y 1 cucharada de aceite de oliva.
Guarda el exfoliante en un recipiente hermético hasta 1 semana y, cuando te duches, frótate suavemente la piel con un puñado de exfoliante; después, aclárate bien y sécate con palmaditas.
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Cuidados sutiles para pieles sensibles
Para muchos, el cuidado de la piel en verano puede ser tan sencillo como seguir una rutina básica. Sin embargo, los que tienen la piel más sensible pueden requerir una atención adicional. Prueba este remedio casero calmante y limpiador para hidratar y tonificar la piel sensible.
Mascarilla y tónico de sandía
Mascarilla de sandía y plátano
1 cucharada de zumo de sandía
2 cucharadas de puré de plátano maduro
Tónico de sandía
1/3 de taza de zumo de sandía
1 cucharada de hamamelis
1 cucharadita de agua destilada
Para hacer la mascarilla de plátano y sandía En un bol, mezcla el zumo de sandía (para hidratar) y el plátano machacado (para aliviar la inflamación). Aplica la mascarilla sobre el rostro y déjala actuar de 10 a 15 minutos antes de aclarar con agua tibia. Seca con palmaditas.
Para hacer el tónico de sandía En un cuenco pequeño, mezcla el zumo de sandía con hamamelis y agua. Aplica el tónico sobre el rostro limpio y deja actuar 2-3 minutos antes de aclarar con agua tibia. Secar dando golpecitos.
Guárdalo en el frigorífico en un recipiente hermético hasta 5 días.
FUENTE:
Junta Nacional de Promoción de la Sandía (Family Features)
