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Las autoridades estadounidenses afirmaron que las detenciones en la frontera entre Estados Unidos y México han disminuido hasta un 30% en julio para la presidencia de Joe Biden, lo que aumenta las perspectivas de que pronto se levante la prohibición temporal de asilo.

Se espera que la Patrulla Fronteriza de EE.UU. detenga a migrantes unas 57,000 veces durante el mes, una cifra inferior a las 83,536 detenciones de junio, la anterior marca más baja de la presidencia de Biden, según dos funcionarios del Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de EE.UU.

Incluso antes de que la administración demócrata de Biden invocara sus poderes para suspender el asilo el 5 de Junio, las detenciones en la frontera se habían reducido aproximadamente a la mitad desde el máximo histórico de 250,000 en Diciembre, debido al aumento de la vigilancia mexicana. Desde el 5 de Junio, las detenciones han vuelto a caer a la mitad, ayudando a la Casa Blanca a defenderse de los ataques del expresidente Donald Trump y otros republicanos de que los demócratas, incluida la vicepresidenta Kamala Harris, han permitido que la frontera se salga de control.

Bajo el alto, las autoridades estadounidenses niegan una oportunidad de asilo a cualquiera que cruce la frontera ilegalmente. Los niños no acompañados están exentos, y otros pueden solicitar formas de protección similares al asilo, que les permiten permanecer en Estados Unidos con un listón más alto y menos beneficios, como la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura.

Cuando se le pidió que comentara las cifras de julio, el Departamento de Seguridad Nacional se remitió el miércoles a una declaración de la semana pasada en la que afirmaba que las detenciones habían descendido un 55% desde que entraron en vigor las restricciones al asilo.

Según la suspensión, las autoridades estadounidenses niegan la posibilidad de asilo a cualquiera que cruce la frontera ilegalmente. Los menores no acompañados están exentos, y otros pueden solicitar formas de protección similares al asilo, que les permiten permanecer en Estados Unidos con un listón más alto y menos beneficios, como la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura.

Los mayores descensos se han producido en las nacionalidades más fáciles de deportar, entre ellas los mexicanos, pero también aparecen menos personas de otros países a medida que se imponen otras restricciones a los viajes, según las autoridades. La migración china parece haberse visto frenada por los nuevos requisitos de visado de Ecuador y el aumento de las deportaciones estadounidenses a China.