1 Estiramientos matutinos
Si vas con prisas, es posible que no oigas las señales que te envía tu cuerpo. Por eso, cada mañana, al levantarte, dedica unos minutos a tomar conciencia de cómo se siente. Acompáñalo de una breve rutina de estiramientos, que te ayudará a liberar la mente, mejorar la postura y la circulación, eliminar tensiones y darte energía para empezar el día.
2 Come bien
No se trata sólo de lo que comes, sino también de cómo lo haces. Intenta comer a horas regulares, sin estrés, y evita picar entre horas.
3 Mantente en movimiento
Si no encuentras tiempo para hacer deporte, puedes incorporar la actividad física a tu vida diaria subiendo por las escaleras en lugar de coger el ascensor, yendo andando al supermercado o moviéndote mientras haces una llamada telefónica.
4 Respira hondo
La respiración es clave para la relajación y la atención plena. En mitad del día, busque unos minutos para detenerse y respirar lenta y profundamente, concentrándose sólo en eso sin dejar que su mente se desvíe.
5 Sal al exterior
Disfruta del aire fresco, de la brisa en la cara, del aroma de la hierba fresca y del sonido de los pájaros.
6 Socialice
Conectar con la gente que queremos es una de las mejores formas de levantar el ánimo. También se ha demostrado que tiene efectos beneficiosos sobre la salud física.
7 Dormir bien
Muchas de las funciones de nuestro cuerpo, tanto físicas como mentales, se ven afectadas por la falta de sueño. La mayoría de nosotros necesitamos entre 7 y 8 horas por noche para reponer energías para el día siguiente.