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¡Nos encanta el espíritu navideño! Esta fiesta está presente en diferentes culturas alrededor del mundo. Y aunque su esencia es la misma, cada país tiene su propia forma de celebrarla. Esto ha dado lugar a tradiciones de Navidad alrededor del mundo tan diversas como fascinantes y hasta escalofriantes.

Aqui hay ocho de las costumbres navideñas únicas y más curiosas de diferentes culturas que quizás no conocías.

1. Sinterklass en Países Bajos

A mediados de noviembre un mágico barco de vapor se acerca a algún puerto de Países Bajos. A bordo se encuentra Sinterklass (San Nicolás) y su grupo de ayudantes conocidos como Chimney Pete (Pete Chimenea). Viajan desde España hacia estos lugares para darle regalos a todos los niños que se portan bien.

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Con su llegada los niños tienen derecho a poner su zapato bajo el árbol las veces que quieran para recibir pequeños regalos y dulces tradicionales holandeses. Sin embargo, el día más esperado es la tarde del 5 de diciembre. Este día se celebra Pakjesavond o la Fiesta de San Nicolás.

Por la tarde, alguien toca a la puerta de las casas en Países Bajos. Es tan rápido que nadie logra verlo. Al abrirla los niños que fueron buenos encontrarán un gran saco de yute lleno de regalos.

2. Krampus en Austria

Esta es una de las tradiciones navideñas alrededor del mundo más terrorífica para grandes y pequeños. Krampus es el lado obscuro de San Nicolás en la época de navidad. Se trata de una criatura demoníaca que castiga a los niños que se portan mal. Tradicionalmente, Krampus es representado con cuernos, lengua larga y pelaje negro.

En Austria, cada 5 de diciembre, en la víspera de San Nicolás, se celebra la “Krampusnacht” o la Noche de Krampus. En esta celebración es común que las personas se disfracen de la criatura y participen en desfiles. También puedes encontrar a esta demoniaca figura caminar solitario por las calles.

Aunque la fiesta más conocida es en Austria, también puedes encontrar representaciones de Krampus en el sur de Alemania, Hungría, Eslovenia, República Checa, Croacia e Italia del Norte.

Su aspecto puede ser intimidante, pero tiene un papel cultural importante en las festividades invernales. Si lo piensas de esta forma, es un buen recordatorio de que hay que portarnos mejor.

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3. Posadas en México

Estas fiestas conmemoran el viaje de María y José desde Nazaret a Belén en busca de un lugar seguro para el nacimiento de Jesús. Se celebran todas las noches del 16 al 24 de diciembre. Se realizan procesiones que simulan el peregrinaje de la pareja, mientras las personas cantan villancicos y piden posada o refugio en diferentes casas.

La procesión termina con una gran fiesta en la casa que, finalmente, acepta darles refugio. Aquí, los asistentes pueden disfrutar de música, platillos tradicionales como tamales y ponche, hasta vibrantes piñatas rellenas de frutas y dulces. ¡Diversión pura!

4. La cena de KFC en Japón

La Navidad no era una fiesta popular en Japón a mediados de 1970. Con esto en mente, la cadena de pollo frito Kentucky Fried Chicken (KFC) lanzó su campaña de marketing “Kentucky for Christmas” o Kentucky para Navidad. Esta resultó ser un éxito rotundo y posicionó a los restaurantes como el lugar ideal para disfrutar de una comida especial.

Desde entonces, esta tradición navideña se ha arraigado en la cultura japonesa, al punto en que muchas familias planifican con anticipación y hacen sus pedidos por adelantado en sus KFC más cercanos para evitar las largas filas que se forman durante la temporada de Navidad.

Pero el menú especial de Navidad en KFC Japón a menudo incluye algunos extras. Además del clásico pollo frito, también ofrecen pastel de Navidad y vino espumoso.

5. Finlandia donde la Navidad no tiene fin

¿Sabías que la casa de Santa Claus está en Finlandia? Sí, y lo mejor es que puedes visitarla durante todo el año, sin importar si es Navidad o no. La pequeña ciudad de Rovaniemi en el Círculo Polar Ártico, recibe a millones de visitantes cada año en búsqueda de una reunión privada con Papá Noel.

Además de vivir las tradiciones navideñas sin límite, en el Pueblo de Santa Claus podrás enviar postales con el sello oficial del Polo Norte, dar de comer a sus renos, viajar en trineo tirado por perros huskies y hasta conocer a la Sra. Claus en persona.

6. La bruja Befana en Italia

En Italia, la tradición de la Navidad se extiende hasta el 6 de enero con la llegada de la Befana, una bruja amigable que viaja en una escoba y llena los calcetines de los niños con dulces y regalos si han sido buenos, o carbón si han sido malos.

Esta tradición se basa en la historia de una mujer que rechazó la invitación de los Tres Reyes Magos para ver al niño Jesús, y más tarde, arrepentida, intentó encontrarlos, dejando regalos a los niños en su camino.

VENICE, ITALY – JANUARY 06: Rowers dressed in costume race along the Grand Canal for the “Befana” Regatta on January 6, 2014 in Venice, Italy. In Italian folklore, Befana is an old woman who delivers gifts to children throughout Italy on the feast of the Epiphany on January 6 in a similar way to Saint Nicholas or Santa Claus. (Photo by Marco Secchi/Getty Images) Crédito: Getty Images

7. Yule Lads en Islandia

En Islandia, los niños esperan la visita de los 13 Yule Lads, figuras traviesas parecidas a duendes, que visitan a los niños durante los 13 días previos a la Navidad. Cada noche, los niños dejan sus zapatos en la ventana y reciben regalos de estos personajes si han sido buenos o encuentran papas podridas si han sido malos.

8. La cabra de Gävle, Suecia

La Cabra de Gävle es una tradición navideña única en la ciudad de Gävle, Suecia. Tiene su origen en 1966 y consiste en construir una enorme figura de cabra, hecha principalmente de paja, en la Plaza del Castillo (Slottstorget) como parte de las celebraciones navideñas.

La cabra llega a medir más de 13 metros de altura y 7 metros de largo. Es famosa por ser objeto de vandalismo: casi cada año, a pesar de los esfuerzos para protegerla, personas intentan quemarla o destruirla de alguna manera. Este acto se ha convertido, irónicamente, en parte de la tradición y el misterio que rodea a la Cabra de Gävle, generando atención internacional y añadiendo un elemento inusual a las celebraciones navideñas de la ciudad.