BOGOTÁ, Colombia – El alcalde de la capital colombiana anunció el lunes nuevas medidas para reducir el consumo de agua en esta ciudad de ocho millones de habitantes, donde la sequía asociada al fenómeno climático de El Niño ya ha llevado a las autoridades a racionar el agua en la mayoría de los barrios y a pedir a los residentes que cambien sus hábitos de ducha.
En una declaración difundida por los medios de comunicación locales, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, dijo que los hogares que consuman más de 22 metros cúbicos de agua al mes tendrán que pagar tasas adicionales. También amenazó con imponer multas de hasta 300 dólares a las personas que laven sus coches en la calle o realicen otras actividades que se consideren un derroche de agua.
El alcalde dijo que los autobuses urbanos, que normalmente se lavan todos los días, ahora sólo se lavarán una vez a la semana. Por razones de salud pública, el interior de los autobuses deberá seguir limpiándose a diario.
“Hemos empezado a reducir el consumo de agua, pero aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar nuestros objetivos”, dijo Galán.
Los racionamientos de agua son poco frecuentes en Bogotá, una ciudad situada en una zona húmeda del norte de la cordillera de los Andes y rodeada de bosques nubosos y campos verde esmeralda.
Ante esta situación, las autoridades de Bogotá pusieron en marcha la semana pasada un sistema de racionamiento de agua que divide la ciudad en nueve zonas. A cada zona se le corta el suministro de agua durante 24 horas, de forma rotatoria.
Galán dijo el lunes que desde que comenzó el sistema de racionamiento el jueves, el consumo de agua de la ciudad ha bajado a 16,01 metros cúbicos por segundo, desde los 17,84 metros cúbicos por segundo. Pero el alcalde dijo que el consumo de agua de la ciudad debe bajar a 15 metros cúbicos por segundo para que los embalses se recuperen.
En los últimos días, los funcionarios municipales también han instado a los residentes a consumir menos agua, limitando sus duchas a cinco minutos y cerrando los grifos mientras se lavan los dientes.
El alcalde también sugirió a los habitantes de la capital que dejaran de ducharse a diario, como es costumbre en Colombia, sobre todo cuando no tienen que salir de casa.