La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, dijo el miércoles que la administración Trump ha revocado una decisión que habría protegido de la deportación a unas 600,000 personas procedentes de Venezuela.
En «Fox and Friends», Noem dijo que revocó la decisión tomada por su sucesor, Alejandro Mayorkas, en los últimos días de la administración Biden que extendió el Estatus de Protección Temporal.
«Antes de que dejara la ciudad, Mayorkas firmó una orden que decía que durante 18 meses iban a ampliar esta protección a las personas que están en estatus de protección temporal, lo que significaba que iban a poder quedarse aquí y violar nuestras leyes durante otros 18 meses», dijo Noem. «Hemos parado eso».
La medida entra en vigor inmediatamente. El aviso de seis páginas del DHS dice que la decisión de la administración Trump restablece el statu quo anterior a la decisión de la administración Biden de extender las protecciones para los venezolanos hasta octubre de 2026. Ahora la expiración del TPS vuelve a la fecha original de abril de 2025.
La administración Biden extendió previamente las protecciones a más de 230,000 salvadoreños, 103,000 ucranianos y 1,900 sudaneses que ya viven en EE.UU. Noem no dijo qué pasaría con ellos y el aviso del DHS sólo se refiere a los venezolanos.
La designación TPS otorga a las personas autoridad legal para estar en el país, pero no proporciona un camino a largo plazo hacia la ciudadanía. Dependen de que el gobierno renueve su estatus cuando expire. Los críticos han afirmado que, con el tiempo, la renovación del estatus de protección se convierte en automática, independientemente de lo que ocurra en el país de origen de la persona.
The New York Times informó por primera vez el martes del cambio de política.
Los venezolanos que gozaban de la protección podrían ahora ser expulsados del país, aunque EE.UU. no mantiene relaciones diplomáticas con Venezuela, lo que limita las opciones de deportación. Otros países que no reciben deportados son Cuba y Nicaragua, pero Noem dijo que el presidente Donald Trump «claramente ejercerá toda la autoridad y el poder que tiene para hacer que estos países los tomen de vuelta.»
El Congreso creó el TPS en 1990 para evitar deportaciones a países que sufren desastres naturales o luchas civiles, dando a la gente autorización para trabajar en incrementos de hasta 18 meses a la vez.
Alrededor de un millón de inmigrantes de 17 países están protegidos por el TPS, entre ellos personas de Venezuela, Haití, Honduras, Nicaragua, Afganistán, Sudán, Ucrania y Líbano. Los venezolanos son uno de los mayores beneficiarios, y la extensión autorizada por la administración Biden les habría permitido permanecer desde abril de 2025 hasta el 2 de octubre de 2026.
El TPS se enfrenta a un futuro incierto bajo el mandato de Trump, que intentó reducir drásticamente su uso durante su primer mandato. La normativa federal permitiría poner fin a las prórrogas antes de tiempo, aunque rara vez se ha hecho.