LIMA, Perú – El martes (24 de Octubre), la momia más famosa de Perú recibió una reconstrucción facial. La adolescente inca que fue sacrificada en un ritual hace más de 500 años en lo alto de los Andes tiene ahora un busto de silicona que retrata a una joven de pómulos pronunciados, ojos negros y piel bronceada.
Realizado por un equipo de científicos polacos y peruanos que trabajaron con un escultor sueco especializado en reconstrucciones faciales, fue presentado en una ceremonia en el Museo de los Santuarios Andinos de la Universidad Católica de Santa María de Arequipa.
“Pensé que nunca sabría cómo era su cara cuando estaba viva”, dijo Johan Reinhard, el antropólogo estadounidense que encontró la momia conocida como “Juanita” y la “Doncella de Hielo Inca”.
Reinhard descubrió la momia en 1995 a más de 6.000 metros de altitud en el volcán nevado Ampato.
“Ahora, 28 años después, se ha hecho realidad gracias a la reconstrucción de Oscar Nilsson”, dijo.
Nilsson, arqueólogo y escultor sueco especializado en reconstrucciones faciales en 3D de humanos antiguos, dijo a The Associated Press en un correo electrónico que le llevó “unas 400 horas de trabajo” modelar el rostro.
Dagmara Socha, bioarqueóloga polaca del Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia, dijo en la ceremonia que el primer paso para conseguir el rostro de Juanita fue “obtener una réplica del cráneo”.
Luego se utilizaron “escáneres corporales, estudios de ADN, características etnológicas, edad, complexión” en la reconstrucción facial, dijo la universidad en un comunicado.
Según los estudios antropológicos, Juanita fue sacrificada entre 1440 y 1450 d.C., cuando tenía entre 13 y 15 años. Medía 1,40 metros (55 pulgadas), pesaba 35 kilos (77 libras) y estaba bien alimentada.
La causa probable de la muerte fue un fuerte golpe en el lóbulo occipital derecho, según los investigadores de la Universidad Johns Hopkins que realizaron una tomografía computarizada.
Reinhard, que ha descubierto más de 14 sacrificios humanos incas en lo alto de los Andes, incluidos tres niños en una fosa helada en el volcán Llullaillaco de Argentina, dijo que los científicos han estado investigando aspectos de la vida de Juanita, como su dieta y los objetos encontrados junto a ella.
“Estos hallazgos nos han ayudado a comprender mejor su vida y la cultura inca”, afirmó. “Ahora podemos ver cómo era realmente, lo que la hace aún más viva”.